El fin de una era...
Como parece que los mayas se equivocaron y el mundo sigue tal y como lo conocemos, hay que continuar con la lucha del día a día.
Tal y como están las cosas, seguro que alguno hubiese deseado que realmente esta civilización hubiese tenido razón… Pero, según parece, lo que en realidad predijeron era el cambio de una era, de pensamiento… en la que el miedo no gobernaría el mundo; una época de lucha, de transformación…, ¿Una salida a la crisis?…
Quizá inspirado por los augurios de esta cultura, los japoneses en la grafía de su término crisis (kiki) emplearon dos signos con un significado importante: peligro y oportunidad. De sobra es conocido el afán de lucha de la cultura japonesa, experta en crecerse ante las adversidades y de buscar la salida a los problemas que surjan.
En este sentido, la predicción maya se ha convertido en una gran oportunidad de negocio para muchos avispados empresarios, especialmente hosteleros, que montaron todo un negocio en torno al fin del mundo.
Esta nueva era que según los mayas ha comenzado coincide con un cambio de año y el cierre a un annus horribilis, sobre todo económicamente hablando. Es el momento de seguir creciendo como persona y profesionalmente y de seguir luchando y no dejar de buscar las oportunidades que pueden estar donde menos se esperan.